Temprano me he puesto en carretera para salir de Lituania con destino a Varsovia. Cerca de 450 Km. por carreteras de 1 solo carril por dirección y con mucho tráfico de camiones desde que he entrado en Polonia. He tardado más de 7 horas, porque he tenido varias paradas por obras con una sola vía para ambos sentidos. Se nota las subvenciones de la Comunidad Europea porque aparecen muchos carteles en carreteras nuevas.

Cuando he entrado en Varsovia me ha parecido al menos por la zona que he recorrido de camino al camping, muy moderna y con mucha vida en la calle. No me ha dado tiempo después de acercarme, porque estoy a unos 12 Km. del centro, así que mañana lo dedicaré por entero a visitar la ciudad.

Nada más llegar, se ha acercado un matrimonio inglés interesado por el módulo vivienda. Ante la insistencia de ellos, les he dejado subir, hemos hablado del coste, etc, etc. Ellos tenían una autocaravana tradicional y les he tenido hasta que dar los datos del constructor alemán.

El camping es muy bonito y sin duda el de mejor calidad de cuantos he estado desde que salí de casa. Además el precio está muy bien. Sus datos son:

Camping WOK

Latitud: 52º 10.633 N - Longitud: 22º 08.886E

Obredna, 16, 04-867 Varsovia

Tel.: (0 22) 612 79 51

www.campingwok.warszawa.pl

Día agotador con muchas horas de andar de un lado para otro, porque se me ha estropeado el grabador de tarjetas SD, lo que me impide actualizar el web cuando no disponga de servicio Wi-Fi.

He recordado que ayer cuando entraba en Varsovia, vi un anuncio de Media Markt, así que me he puesto a buscarlo desde primera hora de la mañana, para arreglar cuanto antes este incidente. Lo he encontrado después de varios autobuses y de andar bastante, porque está situado en los suburbios, pero he conseguido el mismo grabador que tenía y he aprovechado para comprar otra memoria SD de 2 Gb. Un chollo, porque todo me ha costado 30 €.

Después me he propuesto conocer Varsovia. La cosa es complicada, porque es muy grande. A pesar de tener un buen mapa de la ciudad comprado en Vilna, no aparecía la situación de las oficinas de Turismo y en el centro no las hay. Aquí se habla muy poco inglés, por lo que cuesta mucho encontrar a quién preguntar, incluso he entrado en una librería y me han dicho que no sabían dónde podría conseguir por la zona, lo que andaba buscando.

No obstante, he parado a un joven y me ha dado la orientación del casco antiguo. He tenido que ir andando, porque saber el número de autobús correspondiente, es casi imposible. A la tarde me he topado con una oficina de información sin querer y resulta que tenía muy buena documentación, no sólo de Varsovia, sino de toda Polonia por regiones, con rutas y los puntos de interés. Así que he decidido quedarme otro día más y visitar algunos lugares que me parecen importantes.

La vuelta al camping, ha sido un tanto curiosa. Está a 12 Km. y a la mañana he cogido otro autobús, así que gracias al GPS de mano, iba controlando como me iba acercando para bajarme, bajo una lluvia torrencial. Mis vecinos de autobús me miraban un tanto perplejos, porque yo iba con el aparato pegado a la ventanilla para no perder la señal del satélite.

Mañana haré la "Ruta Real", en la que pasas por los mejores lugares de Varsovia.

Este segundo día en Varsovia lo he aprovechado mucho más. Parece mentira que con un solo día de toma de contacto, te puedas mover con mucha más soltura. Sitúas enseguida los puntos importantes de referencia, como grandes avenidas, plazas, e incluso me he atrevido con los autobuses y tranvías, que los hay a cientos.

He realizado la "Ruta Real", que algunas zonas sin saberlo, las había visto ayer. He llegado hasta el Palacio Wilanów, que es un clásico de las visitas turísticas y que está a unos 7 Km. del centro.

Hoy también he andado mucho, porque esta ruta es muy larga y pasa por algunos grandes parques que tienen palacetes o cosas de interés. He subido al Palacio de Cultura, que es un ¡¡¡ auténtico monstruo de piedra!!! en el centro, regalo de la Unión Soviética y desde el que se tiene unas buenas vistas panorámicas.

Al igual que ayer, ha hecho mucho calor al mediodía, y al atardecer ha descargado una tormenta de verano, pero como voy preparado con mi capa de agua por si acaso, no me ha importado mucho y por lo menos ha refrescado.

Mañana saldré para Cracovia y sus alrededores que parecen muy interesantes.

Hoy es domingo y buen día para coger la carretera. Por la mañana temprano he salido de Varsovia sin nada de circulación y las carreteras aunque de piso malo, eran de 2 vías por cada sentido y eso ha hecho que avanzase mucho. Al mediodía ya estaba en Wieliczka, a 12 Km. de Cracovia, para ver una famosa mina de sal, declarada Patrimonio Mundial por la Unesco. Al ser domingo, estaba lleno de visitantes y hemos formado un grupo de extranjeros para las explicaciones en inglés.

La verdad es que la mina salvo un par de cosillas no me ha gustado. Es una mina grandísima y hemos tenido que bajar 55 tramos de 7 escalones. Hay varias bóvedas, entre las que destaca la St Kinga's Chapel, que está abarrotada de esculturas talladas en sal. Toda la mina está llena de figuras de sal principalmente religiosas.

Han hecho hasta un centro de convenciones para reuniones de negocios y bodas. Es decir, en su conjunto todo muy vulgar, lo cual es una pena, porque la mina en sí, es de dimensiones espectaculares y se le podría sacar más partido.

Un tema sí ha sido agradable. En una bóveda cerrada, con un simple juego de luces y música de su hijo predilecto F. Chopin, hemos comprobado la excelente acústica que tiene.

Después de un par de horas, me he ido a buscar el camping y mañana visitaré Cracovia.

Camping SMOK

Latitud: 50º 02.814 N - Longitud: 19º 52.817E

Kamedulska, 18 - Cracovia

Tel.: +48 12 429 83 01

www.smok.krakowa.pl

El día ha estado gris y con mucha lluvia, lo que supongo que ha eclipsado en parte la fama que tiene Cracovia. Digo esto, por echar la culpa a algo, porque si bien es realmente una ciudad medieval bonita, no ha cumplido con las expectativas que yo tenía de ella. Tal vez también, porque había oído hablar mucho de su arquitectura como joya medieval y me había hecho una imagen idealizada. El caso es que aunque me ha gustado no la sitúo por encima de Tallinn ni de Vilna.

Pienso que conforme vas viendo ciudades medievales, te vas volviendo más exigente y sobre todo, en función de la información que has recibido y su fama, esperas encontrar algo superior que justifique ese renombre, cosa que no siempre se da.

Me he encontrado con un grupo de jóvenes de Bilbo, que estaban cabreados porque les querían cobrar cada vez que entraban en una sinagoga para echar un vistazo. Hemos estado hablando un rato sobre su viaje con Interrail. Su próximo destino era Praga y venían de Viena y Budapest, precisamente a las que me dirigiré a partir de mañana.