Comienza otro año y de nuevo siento necesidad de seguir viendo cosas. He pasado las navidades en casa desarrollando la adrenalina necesaria para moverme otra vez por el mundo, ahora acompañado de mi mujer.

Durante los 2 años anteriores en los que cogí multitud de aviones de todo tipo, no había tenido ningún incidente, pero este año parece que la cosa ha empezado un poco mal.

Con un poco de retraso ayer salimos de Madrid con destino a Santiago (Chile), pues bien, después de casi 7 horas de vuelo y cuando todos íbamos adormilados, se han encendido de golpe las luces de cabina y con una fuerte voz el comandante nos ha comunicado que había un problema técnico y que si bien no constituía peligro de riesgo para el avión, íbamos a aterrizar en Canarias y que ya nos indicarían lo que debíamos hacer. Se ha formado un pequeño revuelo y la azafata ha tenido que atender a una señora que se encontraba mal, y a quien le decía que era un problema de falta de oxígeno. Carmen y yo nos hemos levantado para ir al aseo y hemos notado una sensación de desequilibrio porque el avión estaba descendiendo. Hemos aterrizado sin novedad y nos han llevado en autobuses a un hotel de Las Palmas de Gran Canaria, indicándonos que iban arreglar el avión y que a la tarde reanudaríamos el vuelo a Chile. En la comida, otros viajeros que parecían más enterados, nos han comentado que el problema había sido la rotura de una de las capas de la ventana de cabina del piloto, quien había descendido de altura y presurización para que no se ejerciera tanta presión sobre el resto de capas de cristal. Lo que nadie de los viajeros sabemos es la causa de la rotura, pero no parece que pudiera ser por ningún golpe, porque a 10.000 metros de altura, salvo meteoritos, no sé que puede andar por allí.

Yo personalmente me inclino por ¡¡¡ causas de vejez !!! del aparato, porque el avión, un Boeing 340 de Iberia presentaba una "cara bastante marchita" y concretamente el peor de cuantos he utilizado en trayectos largos de otras compañías.

Y aquí estamos, Son cerca de las 9 de la noche y nos encontramos esperando a que nos llamen en el terminal de salida.

¡¡¡ Bien empezamos los viajes del año !!!.

Por fin hemos llegado a Chile, eso sí, con 21 horas de retraso y 2 noches prácticamente sin dormir. Aterrizábamos a las 6 de la mañana y nos hemos dirigido al mismo "hostel Andes" en el que estuve la vez anterior. Su céntrica ubicación, su cercana boca de Metro, limpieza y la amabilidad de sus empleados, son los principales aspectos a tener en cuenta y merecen ser recomendados para un buen hospedaje en la capital de Chile.

Lo primero que hemos hecho ha sido gestionar los vuelos internos de Chile que los había dejado abiertos por los excesivos precios que aparecían en Internet en la compañía LAN, principal aerolínea del país. Parece ser que controlan la IP de conexión del cliente que quiere contratar y a los de fuera de Chile, aplican precios de más del doble, como así lo he podido comprobar hoy mismo. El vuelo a la Isla de Pascua para 2 personas, en Internet me salía 2.170 €, pues bien, hoy aquí, en las propias oficinas de LAN y no siendo los billetes más económicos porque ya no quedaban, me ha costado 970 €. igualmente y en la misma proporción ha ocurrido con el resto de vuelos nacionales, por lo que aconsejo si se puede, gestionar la compra en Chile, porque la diferencia en los precios es abismal.

Una vez resuelto este tema nos hemos ido a visitar Santiago, empezando por e Cerro de San Cristóbal, desde el que se tiene una vista de toda la ciudad, aunque como siempre, la densa polución impide apreciar con precisión la cercana cordillera de los Andes. Palacio de la Moneda, Plaza de Armas, etc. han sido otros lugares que hemos visitado, afianzándose la buena impresión que el año pasado ya saqué de este país, en cuanto a que parece floreciente y con buenas perspectivas futuro.

Mañana comenzaremos el periplo por Chile, acercándonos a Puerto Montt como primera escala, para visitar la zona de los lagos: Pucón, Puerto Varas, Volcán Osorno, etc.

Hoy nos hemos desplazado en avión a la "Zona de los Lagos" y nuevamente hemos tenido problemas en el viaje, con la compañía LAN y no precisamente técnicos, sino de tipo organizativo-comercial, ya que cuando hemos ido a hacer el check-in, nos han dicho que tenían ¡¡¡ overbooking !!! y si no nos importaba esperar al siguiente vuelo con una compensación económica. No hemos aceptado la oferta y hemos montado en cólera, haciéndoles saber que teníamos el billete pagado y los asientos ya asignados y que arreglasen como pudiesen el entuerto, pero que nosotros volábamos porque ellos tenían obligación por "ley" de solucionar el problema que ellos mismos habían creado. También les hemos pedido que viniese el supervisor de la compañía para hablar muy seriamente con él.

El supervisor no ha aparecido, pero han debido encontrar a algunos viajeros que han accedido a la oferta de compensación económica porque nos han dado las cartas de embarque, cosa que parecía imposible de conseguir. "Reclamar la presencia del supervisor" y recordarles la "obligatoriedad por ley" que tienen de solucionar el tema a conveniencia del viajero, son las armas a esgrimir y nunca "callarse y aceptar sin más".

Nada más llegar a Puerto Montt, hemos cogido el coche de alquiler que teníamos reservado en "Alamo" y hemos salido con dirección a Pucón, llegando al atardecer. Nos hemos alojado en el mismo hotel ecológico en el que estuve la vez anterior llamado "Ecolen" y del que tenía un buen recuerdo.

Sólo hemos tenido tiempo de dar una vuelta antes de cenar y de recoger información para la visita que haremos mañana al Parque Nacional de Huerquehue.

Con un tiempo que amenazaba lluvia, hemos salido del hotel para dirigirnos al Parque Nacional de Huerquehue, situado a unos 35 Km. de Pucón, de los cuales los 13 últimos transcurrían por pista de tierra con un traqueteo constante del pequeño coche que llevamos.

Para mí era ya terreno conocido por lo que no he tenido problemas para llegar a la caseta de información desde donde partía el recorrido que queríamos hacer: subir a los lagos de: Chico, Toro y Verde con visita a algunas cascadas por el camino.

Es un itinerario muy popular, pero las 5 horas que en principio se tardan para subir y bajar, más la dureza por la empinada subida con algunos tramos de barro incluido, hacen que no lleguen ni la mitad de los que inician el ascenso. Como anécdota, un señor que subía con sus hijos ¡¡¡ totalmente asfixiado !!! nos ha preguntado cuanto faltaba para llegar, y realmente le hemos dicho lo que estimábamos que les faltaba, 40 minutos, a lo que ha respondido que daba las gracias a todo a los que había preguntado por el camino por el intento de animarle, pero que desde que había salido del coche, todo el mundo le decía que le faltaban 40 minutos y de eso hacía ya un par de horas. Por lo menos, se tomaba el esfuerzo con alegría.

Otro de los detalles es la gran educación que tienen los chilenos en la montaña, todo el mundo con el que te cruzas te dice ¡¡¡ hola !!! y si es un grupo numeroso también, cada uno de ellos te saluda, por lo que te pasas el día diciendo ¡¡¡ hola !!! incluso los extranjeros utilizan este saludo en lugar de su ¡¡¡ hi !!! habitual.

Carmen a pesar de que en algunos momentos refunfuñaba porque no veía que llegaba el final, ha cogido un ritmo muy bueno y ha llegado sin problemas, reconociendo que merecía la pena subir hasta arriba para disfrutar del precioso entorno de los lagos.

El tiempo se ha mantenido sin llover y aunque no hemos podido disfrutar de las vistas del volcán Villarrica desde los miradores que hay en el camino porque estaba totalmente cubierto de nubes, hemos pasado un bonito día de monte.

Mañana abandonaremos Pucón y bajaremos hacia Puerto Varas para ver el bellísimo volcán Osorno.

Hoy hemos iniciado el viaje lloviendo y así ha estado hasta nuestra llegada a Valdivía, momento en el que ha comenzado a aclararse el tiempo e incluso salir el sol. Nos ha gustado esta ciudad, donde puedes disfrutar del mercado fluvial, de los leones marinos que esperan que te portes bien y les eches un poco de comida y además como estaban celebrando el aniversario por los 459 años que han pasado desde que se fundó Valdivia con desfile militar incluido, el ambiente era festivo. Después de pasear un rato por su costanera, nos hemos desplazado en coche hacía Niebla, que está a orillas del mar donde hemos visitado un antiguo fuerte español y que lo que mejor que tenía era sus preciosas vistas de la costa.

Hemos parado a comer en un restaurante donde hemos pedido una fuente de marisco que lo único que tenía bueno era su bajo precio, porque era prácticamente incomestible. Carmen ya lo ha probado y este era el único objetivo, yo ya conocía su calidad por lo que ya no volveremos a pedirlo de nuevo. Para nosotros, este marisco tiene un extraño sabor desagradable, tal vez porque esperamos que se parezca al que estamos acostumbrados de nuestro Cantábrico y desde luego, no se parece en nada.

A continuación nos hemos dirigido hacia Puerto Varas donde hemos llegado a media tarde y no he tenido problemas para encontrar alojamiento en el hospedaje " Ellenhaus " que está muy bien situado y con buenas tarifas. Hemos estado en la Oficina de Información para enterarnos de la situación de las carreteras que rodean el lago Llanquihue y de las previsiones del tiempo, el cual parece que mejorará mañana. A ver si es cierto, porque sería una pena no poder disfrutar de la vista del volcán Osorno, uno de los que más me gusta de todos los que he visto en el mundo.

Mañana después de la excursión mañanera por el lago, nos dirigiremos a Puerto Montt donde finalizaremos la visita a esta zona de la Araucanía y Los Lagos.

Día dedicado a rodear el lago Llanquihue, lo que nos ha llevado prácticamente toda la jornada. A pesar del buen tiempo, ha tardado bastante en aclararse la cima del volcán Osorno para poder verlo, pero poco a poco ha ido apareciendo con la majestuosidad que le caracteriza y no hemos abandonado su vista en todo el recorrido. La carretera que rodea el lago tiene muchos tramos sin asfaltar y llamado aquí de ripio, lo que nos llevaba bastante tiempo avanzar.

A la altura de Centinela hemos disfrutado de un paisaje espectacular del lago color azul añil y al fondo el volcán. Hemos comprado tomates, fruta y un bocadillo para comer en una cascada a la que hemos accedido andando más de media hora entre el barro. Como se nos estaba haciendo tarde hemos querido volver a pernoctar en Puerto Varas, pero ha sido imposible porque todos los hoteles estaban llenos. Aquí es pleno verano y hay mucha gente de vacaciones en estos sitios turísticos.

A pesar de lo que pueda parecer en la siguiente foto ¡¡¡ acerca de mis inversiones en el extranjero !!! y aclarando que me llamo Eduardo Cabañas, no he solicitado hospedaje en " Cabañas Don Eduardo", donde tal vez me hubiesen hecho descuento por la curiosidad del parecido, ya que el hospedaje tenía pinta de ser de precio muy elevado.

Así que nos hemos acercado a Puerto Montt donde no hemos tenido problema para encontrar un hospedaje barato cerca de la zona marítima, y donde la señora Ruth nos ha recibido muy amablemente con su sonrisa permanente, hemos charlado de todo y me he comprometido a recomendarle:

Casa Ruth

Ruth Soto Villegas

Tfno: (65) 283329 - CEL: (08) 4777901

e-mail: pilimatus@hotmail.com

Pudeto nº 228

Puerto Montt

Mañana por la tarde volaremos en dirección a Punta Arenas para ir acercándonos a las Torres del Paine en la confianza de que permanezca el buen tiempo y pueda disfrutar de todo su explender, cosa que no pude hacer el año pasado.

En mi anterior visita, Puerto Montt no me causó ninguna sensación y esta vez lo he podido corroborar.

Hemos estado paseando por el centro de la ciudad y enseguida hemos comenzado a aburrirnos, por lo que hemos cogido el coche y nos hemos dirigido por la costa entrando en la "Carretera Austral", hacia "La Arena", donde según la Oficina de Turismo de Puerto Montt, merecía la pena ir. Este pueblo está a unos 45 Km. y conforme íbamos por la carretera nada de lo que veíamos nos parecía de interés, por lo que nos hemos dado la vuelta para andar con más tranquilidad y llegar al aeropuerto con tiempo para devolver el coche de alquiler y hacer el check-in.

El resto del día ha sido de viaje en un vuelo con la compañía LAN, que sin novedad nos ha llevado a Punta Arenas, donde directamente hemos ido al hostal " Amanecer Austral " del que tengo un recuerdo muy agradable, sobre todo de sus abundantes desayunos y de la amabilidad de la persona que lo regenta.

Mañana por la mañana cogeré el coche que tengo alquilado para marcharnos a Puerto Natales y que Carmen conozca la Patagonia chilena.

Después del agradable desayuno en el hostal " Amanecer Austral " nos hemos acercado a recoger el coche en "Alamo" que tiene los mejores precios de alquiler de vehículos a mi parecer, en todo Chile. Hemos tomado carretera a Puerto Natales y 240 Km. después, llegábamos a nuestro destino.

Me acordaba donde estaba situado el "Hospedaje María" y después de dejar el equipaje nos hemos dirigido a comer. La tarde la hemos dedicado a visitar Puerto Natales, su costanera y con bastante frío debido más a la sensación térmica que a la propia temperatura, hemos reservado una habitación para la próxima noche en un hotel dentro del propio parque de Torres del Paine, al que iremos mañana. La vez anterior que estuve no tuve suerte con el tiempo y esta vez espero poder ver una puesta de sol sobre una de los paisajes más bellos de nuestro planeta. Eso claro está si la meteorología lo permite y se cumplen las buenas previsiones que hay.

Puerto Natales no es que tenga mucho que ver, pero es el principal punto de acceso al mejor parque nacional de todo América del Sur, por el lado chileno y eso se nota por la calle, donde numerosos montañeros ultiman sus preparativos. No obstante, pasear por este pueblo se hace bastante duro por el viento que continuamente barre el lago y que te penetra hasta los huesos.

Como hoy es el cumpleaños de Carmen lo hemos celebrado cenando "cordero patagónico", "vino de Chile" y una copa de aperitivo aguardiente "pisco sour". Una auténtica gastronomía de la zona.

Mañana tenemos intención de salir temprano para recorrer los 80 Km. que nos separan de una de las entradas a Torres del Paine y recorrer durante 2 días todo lo que podamos del parque.

Por la mañana cuando salíamos de Puerto Natales amenazaba lluvia y cuando hemos llegado al Parque Nacional las Torres del Paine, no se veían a causa de la nubosidad general que reinaba en la zona. Pero enseguida ha empezado a soplar el fuerte viento característico de aquí, lo que ha hecho que poco a poco fueran apareciendo imágenes de los picos que se iban sacudiendo las nubes.

Como nos pillaba de paso porque hemos entrado al Parque Nacional por la puerta de la carretera nueva, la primera visita la hemos hecho al lago Grey que tiene un glaciar al fondo y algunos témpanos perdidos por el lago. Durante 1 hora hemos andado por un precioso camino hasta un mirador que nos acercaba al hielo. Allí hemos comido con una preciosa vista y al resguardo del viento, unos buenísimos tomates y bocadillos que nos habíamos preparado porque yo ya sabía que no había muchos lugares donde comer y además los precios son exorbitantes.

La tarde la hemos dedicado a recorrer el frente de toda la cadena de montañas que configuran las Torres del Paine y al atardecer hemos realizado otro paseo de un par de horas acercándonos al "Mirador de los Cuernos", cuando el sol ya estaba bajando y las cumbres estaban bastante limpias de nubes.

Un maravilloso día en el que por fin he podido disfrutar de este espectacular entorno donde la naturaleza ha puesto especial atención, creando el que yo considero uno de los diez paisajes más bonitos de nuestro "Planeta Tierra". Mañana tenemos intención de hacer un recorrido de aproximadamente 8 horas adentrándonos para ver de cerca las famosas "Torres".

Si ayer pasamos un precioso día, el de hoy ha sido excepcional en todos los sentidos, tanto en belleza como en dureza.

Hemos salido de la "Posada Serrano" donde nos hemos hospedado y que está situada dentro del parque, para dirigirnos hacia la zona de las Torres, lo que nos ha llevado 2 horas de coche y desde donde hemos partido andando para llegar al Mirador. La información que teníamos era de una duración de 4 1/2 horas el tramo de subida y 3 1/2 horas el de vuelta, lo que complicaba el tema porque después teníamos otras 3 horas de coche para regresar a Puerto Natales.

No obstante, hemos comenzado a subir pensando en llegar hasta donde tuviéramos una buena perspectiva para sacar algunas fotos y sin intención de llegar hasta arriba, porque además nos habían comentado que el último tramo era muy duro. El caso es que íbamos recortando tiempos conforme a lo que conocíamos y eso ha animado a Carmen a obligarme a llegar hasta arriba, porque las "Torres" tienen delante una montaña de pedriza que impide tener una buena vista si no llegas hasta el mismísimo "Mirador". Hemos tardado 3,20 horas en subir y debo decir que me ha admirado el ¡¡¡ aguante !!! de Carmen para subir por un terreno tan duro, empinado y difícil. Gracias a ella hemos podido admirar un paisaje realmente espectacular y con la agradable sensación de haber conseguido superar con éxito una travesía que yo daba prácticamente por perdida. Hasta el tiempo ha colaborado y hemos podido ver de cerca "Las Torres del Paine", cosa poco habitual porque suelen estar cubiertas de nubes.

Hemos bajado con cuidado porque había mucha pedriza suelta y no llevábamos bastones para ayudarnos, por lo que hemos tardado 3,05 horas en bajar, evitando riesgos de caídas que hubieran complicado el descenso.

Hemos llegado a las 21:00 H a Puerto Natales, realmente cansados después de conducir otras 3 horas por carretera de tierra y piedras, o ripio, como le llaman aquí.

Un gran día, el cual lo recordaremos durante mucho tiempo por la sensación de triunfo y por la belleza de las Torres del Paine que hoy se han mostrado en todo su esplendor.

Hoy hemos retornado en coche a Punta Arenas y por lo tanto hemos descansado físicamente. Con un día bastante despejado hemos salido de Puerto Natales, abandonando las preciosas cadenas montañosas nevadas. El viaje ha transcurrido sin novedad y a unos 40 Km. antes de nuestro destino, nos hemos desviado por una carrera de ripio hacia las pingüineras de Otwai.

En esa zona el viento era muy fuerte y la visita a la pingüinera no ha sido del todo agradable, hasta los pingüinos parecían quejarse y no se nos acercaban por lo que les hemos tenido que ver de lejos. Me he acordado donde encontré el año pasado un pingüino escondido observándome metido en un tronco de árbol en la playa, pero esta vez el tronco estaba vacío. Hasta nos hemos tenido que meter en el coche para comer un bocadillo, porque fuera el viento continuaba soplando y metiéndote el frío en el cuerpo.

Hemos continuado viaje a Punta Arenas y antes de entrar en la ciudad nos hemos enterado de los horarios del ferry que pasa a la ciudad "Porvenir" en Tierra del Fuego, pero casualmente en los días que disponemos no hay buena combinación para realizar una visita.

Nos hemos dirigido de nuevo al hostal " Amanecer Austral " donde nuestro amigo Edixon regenta este agradable hospedaje. Mañana si es posible iremos al Parque Nacional de Palia Ike, del que tengo muy buen recuerdo.

Con un impresionante día de sol nos hemos trasladado 250 Km. en coche hacia la zona de la primera angostura del estrecho de Magallanes con Tierra del Fuego. Cerca de allí se sitúa el Parque Nacional de Palia Ike, que parece más un paisaje lunar que de nuestro planeta.

Si se pudiera delimitar un lugar al que se le pueda llamar " el fin del mundo ", éste sería un firma candidato, porque además de su extrema latitud sur, es un entorno inhóspito donde volcanes apagados, lava, basalto y soledad, mucha soledad son los principales ingredientes.

Hemos estado solos durante varias horas disfrutando de un paraje que daba miedo por su crudeza, pero a la vez bellísimo por su virginidad. Silencio total, el sol pegando fuerte aunque sin darte cuenta, guanacos paseando y estar rodeado de figuras fantasmales de lava, infundían extrañas sensaciones como de estar en otro mundo.

Un día un tanto especial, que yo ya lo viví anteriormente y que quería que Carmen también lo disfrutase, como así lo ha reconocido. Paisajes diferentes y poco habituales que te hacen pensar lo frágiles que somos ante tanta la grandiosa fuerza que se desprende de la naturaleza.

Mañana es nuestro último día en Patagonia porque por la tarde volaremos a Santiago para cambiar de región. Ahora nos tosca disfrutar de la isla de Pascua y de sus moais.

Jornada dedicada a recorrer los alrededores de Punta Arenas, haciendo tiempo para coger el avión a Santiago. Nos hemos dirigido al sur, donde ya no queda asfalto en las carreteras y donde viven exclusivamente comunidades que se dedican a la pesca.

"Fuerte Bulnes", ha sido nuestra primera parada, aunque sólo es como su nombre indica un fuerte que me ha recordado mucho a los que yo tenía de pequeño para jugar. Protecciones de troncos, con iglesia y poco más recuerda a los primeros pobladores. Después nos hemos acercado a "Puerto Hambre", donde la primera comunidad de colonizadores españoles que allí desembarcó murió de hambre, tomando nombre el lugar en recuerdo a dicha tragedia.

Hemos vuelto a Punta Arenas y la última visita la hemos hecho a la zona franca, área libre de impuestos que en principio debía ser barato comprar. Comparando precios lo que sí estaban más barato eran los ordenadores, si bien los temas de fotografía no respondían a lo que cabía esperar.

Después nos hemos trasladado al aeropuerto, llegando a Santiago a la 1:00 de la mañana.

Otro día de transición dedicado a viajar. Hemos volado hasta la isla de Pascua (Rapa Nui) durante 5 horas, llegando al atardecer. Había reservado habitación por Internet en el " Residencial Ana Rapu " y estaban esperándonos en el aeropuerto. Con una tarifas bajas disponemos de una habitación con baño privado y bastante buena situación en el principal pueblo de "Hanga Roa".

Hemos salido disparados a tener una primera visión de la isla y lo que hemos visto nos ha gustado bastante. Rapa Nui es una pequeña isla de 24x12 Km con un turismo que por su pequeña cantidad pasa desapercibido y no influye excesivamente en la vida cotidiana, por lo que enseguida te sientes en una isla que a pesar de estar a medio camino entre Sudamérica y la Polinesia, el paisaje y sus gentes pertenecen sin duda a esta última. La música, los bailes, las anatomías físicas, la gastronomía, etc., me han recordado mucho incluso a las islas Hawaii, que están bastante más al norte.

Hemos vistos los primeros moais y un bello atardecer cenando pescado de la zona, un buenísimo y jugoso "toremu" que nos ha sorprendido por su calidad, cosa poco habitual para nosotros, porque lo normal es que el pescado del pacífico en general nos parezca más ordinario que el nuestro, como el "atún", que aquí lo valoran y lo recomiendan más que el "toremu" y sin embargo nos ha parecido mucho peor.

Mañana iniciaremos los recorridos por la isla, para lo que intentaremos alquilar una motocicleta y andar a nuestro aire, buscando playas solitarias que las hay y moais.

Lo primero que hemos hecho hoy ha sido proveernos de una moto para los 3 días que vamos a estar aquí y poder movernos a nuestro antojo y sin excursiones organizadas, que es lo que más nos gusta. Como es habitual yo ya tengo referenciados en mi GPS los principales lugares de interés, por lo que no tendremos problemas para llegar a los sitios.

Hemos comenzado la visita a la isla visitando la aldea ceremonial de "Orongo", representada en la película Rapa Nui y desde donde el joven protagonista participa en la gran carrera del año, en la que debía competir nadando hasta la isla de enfrente "Moto Nui" coger un huevo de "Manutara" (gaviotín) y volver subiendo por el acantilado hasta el poblado, y claro está, teniendo que ser el primero en llegar y sin romper el huevo, cosa un tanto difícil viendo el precipicio que hay.

Yo tenía grabada en mi retina sobre todo el peñasco de delante de la isla y he disfrutado enormemente al sentirme tan cerca de un paisaje tan mítico. Otro de los puntos fuertes en el que hemos estado ha sido el volcán "Rano Raraku", maravillosa vista de su caldera repleta de pequeñas lagunas y donde el azul del agua y el verde intenso de las laderas conformaban un paisaje maravilloso. Prácticamente hemos estado solos durante toda la mañana, lo que ha hecho que nos sintiéramos transportados a los lejanos tiempos en los que se practicaban los juegos y ceremonias.

Hemos comido en un pequeño acantilado sobre el mar y por la tarde hemos bordeado la costa oeste sin que hayamos encontrado ninguna playa que mereciese la pena. No obstante, como hacía bastante calor, hemos parado en una pequeña cala de piedras para darnos un chapuzón.

Mañana subiremos al norte donde sí hay una preciosa playa llamada Anakena que está rodeada de moais.

Hoy nos tocaba visitar la costa este, en la que hay bastantes vestigios de la antigua cultura de la isla. Hemos salido en motocicleta con fuerte viento e incluso con un poco de frío hasta que ha salido el sol y ha empezado a calentar de lo lindo.

Hemos llegado a Rano Raraku, o como también le llaman aquí " La Fábrica", porque es donde construían los moais y es donde más quedan en pie. Este emplazamiento es un volcán con un lago en el interior de su cono y en sus laderas exteriores se obtenía el material, desentrañando bloques de piedra. Normalmente se realizaba el vaciado de una franja de piedra por detrás del bloque a tratar, para que los escultores tuvieran sitio para trabajar y después lo separaban de la montaña y lo transportaban a su emplazamiento final. Había un moai de 21 metros de altura sin terminar de separarlo de la montaña y estaba medio tumbado conforme a la orientación del bloque de piedra que habían utilizado, aunque no siempre era así. Había otros tumbados del todo porque el bloque de piedra requería trabajarlo en esa posición, por lo que pienso que la técnica a emplear dependía de la posición de la piedra a utilizar.

Después de comer nos hemos acercado a Tongariki, un asentamiento de moais fuera de lo común por 2 motivos: El gran número de esculturas que lo conforman en una hilera en perfecta formación y sobre todo, su ubicación con una impresionante vista de la costa.

A continuación nos hemos trasladado hasta la playa de Anakena, y durante el trayecto nos hemos tenido que tapar los brazos con toallas, porque el sol quemaba de forma implacable. La playa era una maravilla de arena blanquísima, un mar de azul intenso, y una temperatura del agua realmente buenísima.

La vuelta al hotel la hemos realizado directamente por la carretera asfaltada central y en menos de 1/2 hora llegabamos para darnos una necesaria ducha, porque el polvo que acumulas aquí te penetra hasta los huesos.

Lo que ha quedado claro es que mañana volveremos a la playa de Anakena para disfrutar con más tiempo de este maravilloso lugar.

Último vistazo a algunos puntos de interés que teníamos pendientes. Consideramos que los 3 días dedicados a la isla, son los idóneos para andar con tranquilidad y disfrutar tanto de los asentamientos de moais, como de la propia belleza de la isla, con su playa y su zona central más verde.

Hoy es domingo y prácticamente todo el comercio ha estado cerrado. Mientras el pueblo de "Hanga Roa" estaba desierto, en muchas partes de la costa se veían tiendas de camping y pescadores de caña. Nos quedaba pendiente de ver una zona de moais llamada "Ahu Akivi" y que estaba situada en el centro de la isla, por lo que de nuevo en moto nos hemos echado al camino de tierra para tragar mucho polvo y terminar de ensuciar la ropa. De todos las zonas de moais que hemos visto, esta ha sido la que menos nos ha gustado, porque le faltaba ese ¡¡¡ toque especial !!! que le aporta un buen entorno, como es la preciosa costa de aquí, donde generalmente se asientan el resto.

Hemos tenido que volver al pueblo por un camino muy malo, dando saltos y con mucho cuidado de no irnos al suelo, puesto que la cantidad de tierra suelta y polvo hacía que la moto diese tirones con el peligro de pillar una piedra y derrapar.

El siguiente destino ha sido la playa de ayer, la maravillosa "Anakena", si bien nos hemos desviado para conocer la playa de "Ovahe", pero era tan pequeña que casi no se le podía llamar playa. Varios baños de agua buenísima, acompañados de unos bocadillos no tan buenos de tomate con pasta de atún y mucha uva, junto a una larga conversación que hemos tenido con un agradable señor de Valparaíso que había venido a construir una carretera, ha sido lo más destacado de hoy.

Mañana cogeremos el avión de vuelta a Santiago, por lo que el día prácticamente se nos irá en el viaje.

Día dedicado a viajar, por lo que no hay nada que destacar ¡¡¡ y mejor así !!! porque habitualmente cuando coges aviones si destacas algo no suele ser muy bueno. Los vuelos con "LAN" han estado bien y respetando su horario, pero como hemos tenido que añadir 2 horas por la diferencia horaria entre la isla y la península, sólo hemos tenido tiempo para salir a cena en la Plaza de Armas, cerca del "Hostel Andes " que es donde siempre nos hospedamos en Santiago.

También hoy hemos cogido un avión para subir al norte hacia el desierto de Atacama. El destino ha sido Calama y la compañía con la que hemos volado era "Sky Airlines ". El vuelo ha sido tranquilo y hemos hecho escala en Antofagasta durante 20 minutos.

Hemos llegado a media tarde a Calama y hemos salido a dar una vuelta por esta ciudad que poco tiene que ver, salvo todo lo relacionado con las minas de cobre, que de eso aquí hay mucho. Yo ya la conocía y es el punto de conexión para visitar San Pedro de Atacama y el desierto.

Cuando se llega por aire, Calama da una imagen de pequeño pueblo polvoriento que en cualquier momento parece que se lo puede tragar el desierto, pero paseando te encuentras con unos centros comerciales de gran nivel y con buenas marcas comerciales. Es una ciudad bastante cara y donde el dinero procedente del cobre, se deja sentir. El precio de los hoteles en general también es más caro y yo he repetido hospedándome en el "Hotel Olimpo".

Mañana cogeremos el coche que tengo reservado en "Alamo" para recorrer por carretera una buena parte del desierto de Atacama, entregándolo posteriormente más al norte, en Iquique, de camino a Perú.

Después de coger el coche hemos puesto rumbo a San Pedro de Atacama por una carretera muy cómoda, haciendo muy rápido el desplazamiento de los 100 Km. que hay desde Calama. Hemos cogido habitación en el "Hostal Puritama" y rápidamente hemos salido a solucionar el tema de las excursiones a realizar aquí. Queríamos ver la posibilidad de ir al salar de Uyuni en Bolivia, pero el tour tarda 4 días y no tenemos tanto tiempo, así que mañana iremos a ver una zona del altiplano en el que se encuentra el salar de Tara, y pasado mañana a los géiseres de El Tatio. Estas visitas requieren ir en coche 4x4 por lo que hemos nos hemos apuntado a unos grupos.

Para aprovechar el día, hoy hemos estado en la laguna de Meñique que se sitúa en el altiplano cerca de Socaire, a la que hemos podido llegar en nuestro coche a pesar de andar cerca de 30 Km. por camino de cabras. Hemos comido en el mismo lugar donde lo hice el año pasado, pero con la diferencia de que la otra vez estuve yo solo comiendo en familia con la señora de la casa y hoy hemos tenido que esperar turno porque todas la mesas estaban llenas. Parece ser que le va bien el negocio a la "Cocinería Santa Bárbara" en Socaire.

Hemos retornado hacía la quebrada del Jere, dando un paseo por el río que mana de la montaña en pleno desierto, formando un vergel con piscinas para bañarse.

Al final nos hemos acercado al "Salar de Atacama" para ver los flamencos y terminar el día con una bonita puesta de sol. Cuando estábamos esperando a que bajara el sol, unos alemanes se nos han acercado preguntando si hablábamos inglés o alemán. La anécdota ha sido que han confundido a Carmen que iba vestida de verde al estilo de los guardas forestales y le han empezado a hacer preguntas en alemán un tanto curiosas respecto a los flamencos, extendiéndose bastante y profundizando en el tema. Carmen les contestaba y yo no me enteraba de que iba la cosa, pero cuando ya nos marchábamos, han vuelto a pararle para preguntarle más cosas, esta vez relativas a los efectos de la puesta de sol. Parece que los alemanes han pensado que Carmen pertenecía al parque por el atuendo que llevaba y le han asado a preguntas, además en alemán y sin problemas de traducción, marchándose la mar de contentos después de recibir las respuestas que sin inmutarse Carmen les iba dando, como si fuera una auténtica especialista no sólo de la flora y fauna de Atacama, sino además de la implicación de los efectos y de la luz solar en el salar.

Como es natural, después me ha tenido que aguantar unas cuantas bromas respecto a su vestimenta de cuidadora del oso Yogi.

Junto con otros 2 coches 4x4, hemos salido esta mañana acompañados de una agradable pareja de brasileños y de Pedro nuestro guía chileno nacido en Pucón y que ha estado todo el día radiante porque ha llovido, cosa que era la primera vez que veía en todo un año que estaba trabajando en San Pedro de Atacama. Sin embargo para nosotros, la lluvia no ha sido tan agradable porque hoy no hemos podido ver la grandeza del altiplano de Atacama, con su sol justiciero y el paisaje de contrastes de colores ya que faltaba algo de luz.

En algunos momentos ha llovido con ganas, hasta el punto de que nos hemos tenido que meter en el coche porque los chaparrones eran fuertes. Incluso hemos tenido que comer a resguardo en una casa forestal.

Parece que Carmen donde va lleva la lluvia. Ya nos había pasado en el Sahara, después en Monumenth Valley y ahora aquí en Atacama. Lugares donde ver llover es como buscar una ¡¡¡ aguja en un pajar !!!.

Hemos subido a 4.830 metros según mi GPS, soportando Carmen bastante bien la altura y mejor que ayer, sólo en algunos momentos ha tenido dolores de cabeza. En cualquier caso, el día ha sido muy bonito porque el "Salar de Tara" está ubicado en una zona donde hay enormes monolitos a los que les han puesto el nombre de"Catedrales".

Nuestros compañeros brasileños han tenido la amabilidad de indicarnos los sitios de Brasil que no debemos perdernos cuando vayamos en Octubre y además no han facilitado un web donde podremos encontrar lo que necesitemos "www.mochileiros.com", no desaprovechando la ocasión de recabar información que después nos vendrá muy bien.

Hoy nos ha tocado levantarnos a las 3 h. de la mañana porque hemos ido a ver amanecer en los géiseres de El Tatio. El madrugón era necesario porque están a 2 h. de San Pedro de Atacama y por un camino bastante pedregoso. Hemos vuelto a rebasar los 4.000 m. de altitud sin problemas de aclimatación. Ha hecho un intenso frío pero hemos ido preparados con ropa de abrigo. Por otra parte el tiempo no ha sido tan bueno, en el momento de amanecer había nubes que impedían ver el sol saliendo y no se formaban los espectros de contraluz entre el vapor y el sol, tan típicos de aquí.

Hemos continuado por el altiplano viendo vicuñas y llamas, parando en un pueblo de 6 habitantes donde hemos probado unos pinchos a la brasa con carne de llama. Al mediodía dábamos por concluida la excursión que no ha sido tan bonita como la que yo realicé el año pasado, en la que el tiempo colaboró con una precioso amanecer.

Por la tarde nos hemos acercado al "Valle De La Luna", que lo habíamos dejado como despedida por ser el lugar más bonito de Atacama y en el que la puesta de sol merece ser disfrutada. Aunque el tiempo estaba nublado cuando hemos llegado, ha ido abriéndose sólo en ese valle y hemos podido disfrutar de unos bellísimos colores rojizos.

Mañana abandonaremos San Pedro de Atacama y nos iremos más al norte en la costa, a la ciudad de Iquique, viendo como caen las gigantescas montañas de arena sobre el mar.

Día trágico en Chile. Esta madrugada a las 3 1/2 h. de la madrugada he oído mientras dormía en San Pedro de Atacama una sirena. Lo primero que he pensado ha sido de como era posible que a esas horas y en un pueblo en medio del desierto, se pudiera tener tan mala leche como para meter tanto ruido y además de ¡¡¡ manera oficial !!!, porque se apreciaba que no era ninguna alarma de coche, sino algo más insistente pero menos estridente. El caso es que no he hecho caso y me he vuelto a dormir. La primera noticia de que había habido un terremoto me la ha dado mi amigo Juanagus que desde Donosti me mandaba un correo comunicándome algunos problemas que tengo en mi web, además de velar por nuestra seguridad física.

A partir de ahí he comenzado a enterarme de la realidad y me han comunicado que la sirena era una forma de saber que había noticias importantes y que la Presidencia del Gobierno iba a emitir un comunicado acerca de una terremoto de magnitud 8,8 y unos de los más grandes de los registrados en todos los tiempos.

En el hotel había mucho revuelo, porque ya le habían comunicado a una persona que su hermana había fallecido y una joven con la que ayer entablamos conversación en nuestra visita a los géiseres de El Tatio y que nos dijo ser de la ciudad Concepción, salía a toda prisa con el equipaje con destino a su casa, cuando nos había comentado que tenía algunas excursiones más por hacer en Atacama.

En medio de esta situación hemos salido en coche con dirección a Iquique, ciudad costera más al norte. Cuando hemos parado a comer nos hemos enterado que toda la costa de Chile, incluida la zona en la que nos encontrábamos estaba en alerta por riesgo de tsunami y la carretera por la que hemos transitado más de 200 km. iba pegada al mar, similar a la de nuestra costa entre Zarautz y Zumaia.

Aunque todo se veía tranquilo y sin quererlo, de vez en cuando se te iba la vista hacia el mar y al horizonte ¡¡¡ por si acaso !!! pero hemos llegado a Iquique sin novedad y allí nos han comunicado que la Armada Chilena que patrullaba la costa, había decidido suspender la alerta porque el tsunami, después de haber producido un desastre en la zona de Constitución y de algunas islas cercanas, se desplazaba hacia Hawaii.

Día que ha transcurrido con el tema permanentemente presente del terremoto, de las réplicas que se están produciendo, tsunamis, motines en cárceles y muerte, hasta estos momentos más de 300 fallecidos y miles de desaparecidos.

En un par de días abandonaremos Chile por la frontera terrestre de Arica y entraremos en Perú, volviendo a Santiago dentro de casi un mes, tiempo en el que suponemos se normalice la actual situación de caos, principalmente en el aeropuerto que en estos momentos se encuentra cerrado por los desperfectos que se han producido. Estaremos siguiendo la evolución por si tenemos que buscar otra alternativa para retornar a casa cuando debamos hacerlo.

Las réplicas del terremoto han continuado el día de hoy. Nuevos riesgos de tsunamis han sido comunicados y a última hora, el numero de víctimas mortales superaban las 700.

Chile se encuentra en algunas regiones en estado de emergencia, aunque nosotros no lo notamos salvo en que no se habla de otra cosa. Iquique es la ciudad turística del país por excelencia y donde los chilenos pasan sus vacaciones. No obstante, durante todo el día hemos visto pasar continuamente autobuses con destino a Santiago, porque no se puede realizar el viaje por avión y muchos chilenos están regresando a sus hogares para conocer el estado de sus familiares y pertenencias.

Nosotros por nuestra parte nos hemos ido en coche hacia Pisaguas, un pueblo fantasma, remoto y perdido en la costa al que se accede por una carretera vertiginosa que desciende por una montaña de roca y arena que es casi vertical y que parece que en cualquier momento se puede desplomar sepultándolo. Este pueblo es tristemente conocido por su antigua cárcel y por haberse encontrado fosas comunes de la época de Pinochet.

Hemos comido pescado frito de la zona en el único lugar que servían comidas y de camino de regreso nos hemos desviado hacia el llamado "Gigante de Atacama", denominado como la representación humana más grande del mundo. Esperábamos ver un monolito o escultura descomunal, pero nos hemos encontrado con que se trataba de un geoglifo en la ladera de una pequeña colina. Una gran decepción porque no pensamos que respondía al nombre que le han puesto.

De regreso a Iquique, y después de dejar el coche en el hotel, hemos disfrutado de otro bonito atardecer paseando por esta bonita ciudad, finalizando un día tranquilo.

Mañana nos trasladaremos a Arica en Autobús para posteriormente abandonar Chile y pasar a Perú.